Si voy en coche, puede que me encuentre encerrado dentro de un habitáculo que me impida tener plena relación con el entorno. Igual por eso soy feliz montando en bicicleta, porque el aire en la cara me hace sentir en plena libertad.
Mientras la carretera sea más estrecha, mejor para el sentir. Hay que ir oyendo la respiración, notando como el aire entra y sale en armonía. La fuerza la pongo yo, no hay gasto externo.
Esto no se puede hacer yendo en coche: pararse a un lado, disfrutar del paisaje mientras das un trago de agua.
Al llegar a la cima, puedes invertir los colores a gusto, caminar, observar, todo lo que quieras, en libertad.
Y cuando ya estoy saturado de colores, de oxígeno, de vida; doy la vuelta y me voy al encuentro de otra vida.
Oh Freedom ... http://www.youtube.com/watch?v=XKlgL4SkkqA
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Genial entrada Orfilo. ¡Y que gran verdad lo que cuentas!. Con la bici se ven cosas que pasan desapercividas cuando se va encapsulado en el coche.
ResponderEliminarCreo que es la mejor palabra que define un paseo en bici: LIBERTAD
ResponderEliminar