lunes, 31 de julio de 2017

Cala en Cabo de Gata

Este pasado fin de semana he estado invitado en casa de mi amiga María, en Las Negras, precioso lugar. Allí he estado con ella, con Andreas, su pareja, y con mi compañera y amiga del alma: Dima. Tanto María, como Dima y yo, hemos estado trabajando juntos en el Gran Hotel Manzana Kempinski de La Habana. He hecho fotos, muchas, así que haré varias entradas, en función de la cámara utilizada. Esta primera, trata sobre nuestra visita a una cala que se encuentra entre la playa El Corral y la playa de Los Muertos.


El punto 0 es la playa El Corral, desde donde partiríamos nadando hacia la cala, que es el punto 1, con acceso solo por mar. El punto 2 es la zona Norte, casi solitaria, de la playa de Los Muertos. En la siguiente foto aparece María preparándose, con un petate estanco a sus espaldas, y detrás de ella está Andreas, también listo para empezar a nadar.


Mis tres amigos nadando con gafas y snorkel. A la derecha se ve el gran acantilado que teníamos que pasar.


Foto desde abajo al contraluz.


Cómo no me iba a hacer un autorretrato ...


Esta medusa ponía mucho interés en acercarse constantemente a mi cámara.


Y llegamos a la cala, tras unos veinte minutos en el mar. Otros habían llegado usando botes y canoas. Estábamos prácticamente solos.


María nos habló a Dima y a mí de la posibilidad de llegar nadando hasta la playa de Los Muertos. Y aquí vemos a mi amiga preparándose, con nuestros anfitriones al fondo.


Lo de las gafas y snorkel fue una genial idea, porque allí el fondo es variado. Aquí retraté a un pez que pasaba justo por debajo mía.


Un momento de Dima nadando.


Y nuestro selfie particular.


Después de otros veinte minutos de nadar, llegamos algo mareados a la otra playa, así que a descansar un rato. La sal y el estómago vacío, sumado al vaivén en el mar, hacen necesario un momento de relax.


El acantilado a nuestra espalda, hace curiosos dibujos en la roca. La pareja que estaba detrás nuestra, nos dio un paquete de frutos secos, que nos vino de perlas para coger fuerzas. Siempre digo que hay mucha gente buena en el mundo.


En la parte Norte de la playa, estábamos solos con tres parejas a nuestro alrededor. La de delante me ofreció esta bonita imagen.


En el otro extremo, donde el acceso es más fácil, había una buena fila de sombrillas.


Curiosa imagen de una sombrilla solitaria, cuyos dos ocupantes estaban disfrutando de un baño.


Dima disfrutó de unos minutos de tranquilidad, antes de iniciar la vuelta.


De vuelta, otros 20 minutos de ejercicio.


Ya en la cala, a disfrutar de una cerveza y unos frutos secos, transportados en el petate estanco. Después iríamos a dar un paseo y tomar algo en un bar, antes de volver a casa a por una fabulosa barbacoa.


Para despedir esta entrada, una canción de Beatriz Luengo, que me encanta: Más que suerte.



domingo, 9 de julio de 2017

Unas horas en la playa de Bolonia

Acercarte a uno de los restaurantes a pie de playa, comer un buen atún de almadraba, o unos chocos a la plancha en el Correa, para después disfrutar de la playa con su famosa duna, relajado, olvidado del espacio-tiempo.


Una casa con perros; por delante el mar y atrás la montaña.


Todos tenemos derecho al disfrute en libertad.


Pareja paseando.


Lánzala, que yo la recojo ...


Chica con dos niños.


Parejas separadas.


Regreso de la duna.


El sol por los suelos.


Juegos en la orilla.


Deporte y paseo.


De vuelta.


I don´t know why I didn´t come ...


sábado, 1 de julio de 2017

Instantes cubanos

Chicas por calle Obispo.


Hoy toca pescado.


Azul celeste.


Sonrisa en el espejo.


Equilibrio.


Luna llena.


No te quiero mirar.


Paso de cebra.


Coches de época.


Colores urbanos.


Reflejos y grises.


Noche en Parque Central.


Niños jugando.


Moto con sidecar.


Puesta de sol.


Barrio chino.


Blanca en la farmacia.


Perfumería.


Vente pa´ca.