martes, 1 de enero de 2019

Una historia del 2018

Se acaba de ir el 2018, lleno de vivencias a miles de quilómetros del país donde se desarrolló mi vida, con un difícil trabajo que te exige todo de ti, y con un entorno muy diferente al experimentado antes. Han sido muchas emociones, muchas lágrimas, muchas risas y mucho amor.

Enero.
Un paseo un domingo, donde el mar se encaprichó en saltar por encima de la barrera impuesta, creando efectos especiales.


Febrero.
Uno de los llamativos coches que circulan por La Habana, acompañado de nubes caprichosas.


Marzo.
El hombre es solo un reflejo en un universo de color.


El convento de San Francisco es testigo de nuevas historias.


Abril.
Día de playa. Baños y fotos.


Teresa cruzo el Atlántico para pasar algo más de dos semanas en Cuba. Visitamos al Cristo, además de Viñales y pasar unos días en las playas de Varadero.


Mayo.
La lluvia repentina es algo habitual en la isla.


Esta vez crucé yo el charco para pasar el cumpleaños de mi hijo Javier en España. Era su paso a la mayoría de edad.


Junio.
Paseo buscando la caída del sol sobre la bahía.


Buen momento para pescar.


Julio.
Transporte comunitario, disfrute para los jóvenes.


Las Terrazas, río y paraje natural digno de visitar. Yo fui con Zenia y Amanda.


Agosto.
Levantando el vuelo a Cayo Santa María.


Nubes y baños en Brisas del Mar.


Septiembre.
A tumbarse para dormir.


¡Mira qué humano más gracioso!


Octubre.
Visita de mis amigas Elvira y Mireya.


Tirando del caballo.


Noviembre.
Todo es de color.


Pescando bajo los cañones.


Diciembre.
Ocaso del día de los inocentes.


Adiós 2018, bienvenido 2019, donde se espera nueva vida.


Orishas ...


1 comentario:

  1. ahora si me gustan tus fotos en estos te mando las mías para q me promociones. cuídate

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