Por segunda vez he podido salir con los compañeros amantes del ciclismo urbano, defensores de la bici como medida para desplazarse por la ciudad sin contaminar. La cita, en Plaza del Mar, como siempre.
Calle arriba nos hemos dirigido hacia el Pirulí, para coger Ricardo Soriano.
Los niños vuelven a ser protagonistas de estas salidas, recibiendo una educación complementaria muy positiva para el futuro.
También ha habido quien ha sacado a su mascota a pasear en bici, siendo centro de atención de niños y mayores.
No todas las mujeres guapas gustan de coches caros, hay quienes disfrutan de un paseo en bici.
Y hasta las hay que se hacen acompañar por sus hijos, enseñándoles el camino de eso que llaman un mundo mejor.
El paso por Mackintosh lo hemos tenido con unas gotas de agua que deseaban bautizar este evento.
La vuelta en el Pirulí supone siempre la demostración de que las bicicletas necesitan de un espacio para todo aquel que no desea llenar el espacio con perniciosos humos.
La bajada hacia el paseo marítimo por Miguel Cano, es uno de los puntos claves, donde los coches nos obligan a una mayor concentración, si cabe.
Una vez se ha llegado a La Venus, cada uno ha emprendido su camino. El mío ha sido pasar un rato de charla con algunos compañeros mientras tomaba agua con gas y limón, para después entretenerme un rato contemplando el puerto deportivo.
Uno de los cientouneros ha participado en la marcha, llevando consigo a una princesita.
He tenido que tomar prestada una de las fotos de los compañeros, para demostrar que no solo he hecho fotos, sino que también estuve dándole a los pedales.
Estoy seguro de que cada vez somos más los que queremos mejorar este mundo, con granitos de arena como los de hoy, y todo con una pequeña ayuda de mis amigos ... http://www.youtube.com/watch?v=_wG6Cgmgn5U&feature=related
